El piloto de Citroën conseguía una disputada victoria en el Rallye Le Touquet, cita que abría el campeonato francés de asfalto.

 

No lo ha tenido nada fácil Yoann Bonato, pero al final el experimentado piloto campeón en 2017 y 2018 ha superado las adversidades para llevarse la primera victoria del año.

En el inicio del Rallye fue Stephane Lefebvre con el VW Polo R5 de Loeb Racing el que marcó el ritmo, hasta que una salida de carretera en el tercer tramo acababa con su participación en la prueba.

En ese momento Quentin Gilbert con un Citroën C3 R5, cogía el testigo de Lefebvre, y se mantuvo líder toda la primera jornada  aunque con unos márgenes muy escasos con sus perseguidores. El joven belga Willian Wagner también con Citroen ocupaba la segunda posición a 5,9 segundos, y tercero ya estaba Bonato a 7,9 tras solventar unos problemas de motor que le habían retrasado al inicio.

En la segunda jornada las cosas cambiaron, y como se esperaba Bonato pasó al ataque y ya en el primer tramo conseguía auparse al primer puesto, lugar que no abandonaría hasta el final del Rallye. Su máximo rival fue Wagner que se mantuvo muy cerquita hasta que en el tramo 13 sufría una salida de carretera. Estaba muy delicado el asfalto, y los errores se pagaban caros.

El que heredaba la segunda posición era el veterano Eric Brunson con su Ford Fiesta WRC, que acabaría el Rallye a 13,3 segundos de Bonato. Tercero se posiciono un Quentin Giordano que debutaba aquí con el VW Polo R5, quedando muy contento con sus prestaciones. En un ataque final a punto estuvo de arrebatarle la segunda posición a Brunson, situándose a solo 1,4 segundos.

Cuarto clasificado final fue Quentin Gilbert, después de liderar la primera etapa, un error en el primer tramo del segundo día le hacía perder 30 segundos y toda opción de victoria, conformándose con este cuarto puesto.

Buenas prestaciones las de Jean-Baptiste Franceschi, el ganador del Volant Peugeot en 2019 debutaba aquí con el Citroën C3 oficial y firmaba un quinto puesto muy meritorio, rodando cerca del pódium durante todo el Rallye. Una de las decepciones de la prueba fue Mathieu Arzeno, un piloto siempre rapidísimo y espectacular que disputaba la prueba con un VW Polo R5 en busca de un gran resultado para poder seguir el campeonato, pero nunca estuvo en posiciones de pódium y acabo con un accidente fuera de carrera.

Era noticia en esta prueba el debut del nuevo Alpine A110 R-GT en manos de dos experimentadísimos pilotos, Francois Delecour y Cedric Robert. El primero de ellos pudo completar la prueba y así avanzar en el desarrollo del coche, logrando concluir en una más que aceptable undécima posición, mejorando a lo largo del Rallye. La verdad que el terreno no estaba fácil para nadie y menos para un tracción trasera como el Alpine, aunque el bueno de Delecour sabe bien como pelearse con estas máquinas. Los tiempos fueron sobre 2 seg/km más lentos que el scratch, y solo se vieron superados por vehículos R5 o WRC, así que el estreno es bastante prometedor. Veremos cómo avanza la evolución de este singular vehículo en otros Rallyes y terrenos.

Os dejamos un vídeo resumen de la prueba.

 

Borja Romero.

Media.