
Espectacular la jornada de sábado que nos ha deparado el Rallye de Japón, con Sebastien Ogier y Elfyn Evans en plena batalla por llevarse la victoria y con un Adrien Fourmaux poniendo la nota de color distinta entre tanto Toyota.
Evans, comenzaba la jornada decidido a recortar distancias, saliendo a por todas desde los primeros kilómetros. Elfyn comenzaba el día a 10,2 segundos de Ogier y rápidamente daba cuenta de su compañero de equipo en Toyota, Takamoto Katsuta, para colocarse segundo. A partir de ahí, el galés marcó una serie de tiempos demoledores, acercándose a solo 1,4 segundos del francés después del bucle matinal y dejando la lucha por el liderato al rojo vivo.
Pero estaba claro que Ogier no iba a dar su brazo a torcer y el de Gap y en las siguientes especiales desplegaba todo su talento, sobre todo en el último al ser tres segundos más rápido que Evans en un tramo que dominó con autoridad. Sebastien Ogier cerraba el día con un nuevo mejor tiempo en la superespecial de Toyota City, ampliando su ventaja a 6,5 segundos de cara al decisivo domingo.
Además de Ogier y Evans, el otro protagonista de la jornada de hoy era Adrien Fourmaux. El piloto francés lograba alcanzar posiciones de podio a 23″6 del líder y 17″1 de Elfyn, manteniendo su ventaja sobre Sami Pajari en una de sus mejores actuaciones del año y que, por el momento, salva los honores de Hyundai Motorsport en la penúltima cita de la temporada.
Protagonita también, pero de manera negativa hoy ha sido Takamoto Katsuta. El piloto nipón se encontraba en tercera posición a 5.2 segundos de Ogier, soñando con una posible victoria en " su rallye ", pero en la especial de MT. Kasagi cometía un error en una chicane y atravesó varias barreras de plástico llenas de agua. El golpe le costó la dirección asistida y más de cuatro minutos. Ogier, que se encontró con las barreras esparcidas en plena trazada, perdió unas décimas valiosas y cedió 0,6 segundos frente a Evans.
Alberto Novoa.