El piloto francés ha olido la sangre y se ha lanzado a por su noveno título en el Campeonato del Mundo de Rallyes de la FIA.
Con su victoria en el Rallye de Japón, el de Gap está ahora justo donde quería estar cuando tomaba la decisión de disputar todas las pruebas que quedaban esta temporada 2025 y optar a alzarse con su noveno título y dejar a Loeb sin su récord particular.
El ocho veces campeón del mundo resistió los ataques de Elfyn Evans, en una última etapa pasada por agua, ganando por 11,6 segundos y reduciendo la diferencia a tres puntos.
El sexto puesto de Kalle Rovanperä lo deja a 24 puntos del líder, asegurando que los tres pilotos de Toyota sigan en la lucha por el título, mientras que las escasas esperanzas de Ott Tänak se han esfumado.
La lluvia ha sido sin duda una de los protagonistas de esta última jornada en la cita nipona, convirtiendo el asfalto en auténticos ríos de agua estancada. Evans comenzó el día a 6,5 segundos del líder y, en un principio, parecía dispuesto a remontar, superando al francés por 0,8 segundos en la primera etapa de Nukata, pero Ogier tenía claro que llegar a Arabia con buenas opciones dependía de este resultado y recuperara el control en la siguiente etapa en el lago Mikawako.
Ogier era capaz de mantener el ritmo bajo la lluvia y ampliaba su ventaja a 8,3 segundos en la siguiente especial, antes de aumentarla aún más en las dos últimas etapas para asegurar una victoria contundente, sumando además los puntos extra de la Power Stage, en la que era más rápido que Evans en 0,1 segundo !!.
Adrien Fourmaux no tenía tanta suerte y confirmaba otro rallye nefasto para Hyundai. El piloto francés, que marchaba tercero en la clasificación general y era la nota discordante entre los GR Yaris Rally1, se salía de la carretera, chocando contra unos árboles y dejándonos una de las imágines de la temporada al arrancar una puerta de su i20 N Rally1 y retirándose poco después.
Su abandono propició que Sami Pajari consiguiera su primer podio, un resultado que coronó un año de consagración para el finlandés de 23 años y selló un triplete de ensueño para Toyota en casa.
Alberto Novoa.
