La cuarta prueba puntuable para el Campeonato de España de Rallyes de Asfalto, el 46 Rallye Rías Baixas-Vodafone, no comenzó de la mejor forma posible para Miguel Fuster, y todo ello por causa de la lluvia por lo que el asfalto se encontraba mojado, no siendo el terreno más propicio para su Porsche 911 GT 3, por lo que la actitud del piloto alicantino fue no arriesgar.