Alberto Hevia y Alberto Iglesias llegaban a Santander con muchas ganas de lograr un buen resultado que ofrecer a la afición cántabra, muy motivados tras su reciente victoria en el Rallye de Tineo, que les sirvió como un excelente test de cara al Rallye Cantabria.

Las cosas empezaron bien para los asturianos, ya que tras los dos primeros tramos cronometrados figuraban en segunda posición, a sólo 12,4 segundos del piloto canario Luis Monzón. El rallye fue rico en sorpresas desde su inicio, ya que a la inesperada ausencia del líder provisional del campeonato, Miguel Fuster, se unía el pinchazo de Sergio Vallejo en el segundo tramo cronometrado, con lo que dos de los rivales directos en la lucha por el título nacional quedaban ya descartados para una posible victoria.  

Justo tras la primera sección, disputada en terreno seco, la lluvia hizo acto de presencia, y Hevia e Iglesias impusieron un fuerte ritmo en estas difíciles condiciones, alcanzando el liderato de la prueba tras el tercer tramo cronometrado, con 11,3 segundos sobre Monzón. Con la anulación del cuarto y último tramo de la primera etapa debido a la gran cantidad de aceite dejado en la carretera por dos participante accidentados, finalizaba la primera jornada del rallye.

La segunda jornada empezaba con más sorpresas, ya que en el primer tramo cronometrado Alberto Hevia sufría un pinchazo en el neumático trasero derecho de su Škoda Fabia S2000, cediendo de nuevo el liderato a Luis Monzón. En la siguiente prueba especial Hevia debía tomar un ritmo prudente, ya que no podía cometer errores al no disponer de rueda de repuesto, pero aún así hizo el mejor tiempo, recuperando algunos segundos a Monzón, que llegó al final de la tercera sección con una ventaja de 20,2 segundos sobre el asturiano.

Tras el preceptivo paso por el parque de asistencia, los dos últimos tramos cronometrados iban a ser definitivos para conocer el desenlace de un dificilísimo rallye en el que las sorpresas no cesaban, ya que en el penúltimo tramo cronometrado abandonaba Luis Monzón con problemas mecánicos en su vehículo, lo que dejaba a Alberto Hevia en cabeza de la prueba, con una ventaja de más de un minuto sobre el andorrano Joan Vinyes, a falta de un solo tramo por disputarse.

Tras conseguir el mejor tiempo en tres de los siete tramos cronometrados del rallye, Hevia e Iglesias conseguían finalmente una merecidísima victoria que les sitúa de nuevo en la lucha por el título nacional.

El piloto de Pola de Siero se mostraba muy satisfecho: “Ha sido una rallye muy difícil, lo que da aún más valor a esta victoria, que necesitábamos para mantener nuestras opciones de cara al campeonato. Quiero agradecer una vez más a todo el equipo el esfuerzo realizado, y a Škoda y a todos nuestros patrocinadores la confianza que han depositado en nosotros incluso en los momentos complicados. Espero que este sea el inicio de una buena racha y que podamos brindar más victorias a todos nuestros seguidores”.