En un final de infarto, la pareja Pepe López - Borja Rozada se llevaban una victoria muy sufrida, tras estar todo el día luchando con un espectacular Cohete Suárez.

 

 

Teníamos muchas ganas de volver a las cunetas, y el Rallye de Ourense marcaba la vuelta de la competición nacional con una prueba que se presentaba con mucho interés. Con un formato de prueba más compacto las previsiones eran que el Rallye se disputaría más al sprint de lo habitual y la realidad, es que el ritmo marcado desde el inicio fué frenético.

Desde el principio el Rallye fue cosa de dos, tanto Cohete Suárez como Pepe López arrancaron el Rallye con un ritmo fuertísimo, y que Iván Ares, el que se presumía que podía ser la tercera alternativa, no pudo seguir desde el principio. Cohete marcaba los 3 primeros scratch, pero la diferencia con Pepe era de solo 4,8 segundos. En el último tramo de la mañana el de Citroën recortaba la diferencia a 2.6, mientras que Iván Ares ya cedía al mediodia 23 segundos. 

El Rallye fue un continuo toma y daca, cada uno con su estilo muy definido. Un Cohete todo corazón, que ataca sin piedad las cunetas de una prueba que se ensuciaba mucho con el paso de los coches. Mientras que Pepe con una conducción mucho más fina iba poco a poco poniendo el coche a su gusto, siempre a la espectativa. 

 

 

La tarde arrancaba con otros dos scratch de Cohete, que aumentaba la diferencia a 6.4 segundos, máxima renta hasta el momento. Por la tarde Ares se daba totalmente por vencido y solo esperaba un fallo de los dos pilotos de adelante para subir alguna posición. El piloto de Hyundai, con su nuevo modelo, seguro que ya tenía la cabeza puesta en Ferrol, donde deberá atacar aún más si cabe para, en un Rallye más favorable a sus características, pelear de tu a tu con sus dos máximos rivales.

 

Y saltaba la sorpresa. Después de pasar por la última asistencia algo cambiaba, y es que en el penúltimo tramo Pepe López realizaba un crono muy bueno y superaba a Cohete por 9.1 en meta. Esto hacía que en la general ahora fuese Pepe el que llegaba al último tramo lider, pero con una diferencia de sólo 2.7 segundos, de infarto.

Toda la atención estaba puesta en el desenlace final del Rallye, la victoria se jugaría en los últimos 15,54 kilómetros del tramo de Carballiño, que además era el TC+. El primer parcial era favorable a Pepe por 1 segundo y en el segundo parcial ya la diferencia se iba a 5.1, algo extraño cuando en todo el Rallye las diferencias había sido mínimas. Pero es que la suerte a veces también importa, y es que Cohete sufría un pinchazo que le obligaba a parar y cambiar la rueda, con lo que perdía todas las opciones de victoria. Esto le daba a Pepe una victoria final agónica, ya que tuvo que correr hasta el último metro, al no saber que Cohete había tenido problemas. Para muestra las dos llantas izquierdas del Citroën C3 del ganador, que presentaban en meta daños importantes pero sin consecuencias finales.

Con el pinchazo de Cohete este perdía 2 minutos y 27 segundos y su plaza en el podium, ya que se veía superado tanto por Iván Ares como por un Alberto Monarri que estrenandose con el Citroën C3 R5 se tomó el Rallye de aprendizaje y culminaba con un fenomenal podium final. Cohete por su parte era 4º, aunque puede estar muy contento por el ritmo mostrado con su nuevo Skoda EVO, y una conducción que levantó pasiones durante todo el día, a veces agresivo de más pero ganandose al respetable.

Completaban las primeras posiciones, Iago Caamaño, ganador entre el pequeño "Campeonato Gallego" que se formó en Ourense, superando también a un gran Javier Pardo, que corriendo en casa sacó todo el potencial a su menos competitivo Suzuki Swift R4. A continuación 7º final una de las grandes sorpresas, Francisco Dorado en su debut con el VW Polo completaba la prueba mostrando un ritmo realmente competitivo con su espectacular montura. Completaban el Top Ten, Manuel Fernández con el Ford Fiesta y los Skoda Fabia R5 de Pelaez y Vilariño.

En definitiva un gran Rallye que marcó la vuelta a la competición nacional, y que continuará en Ferrol con la segunda prueba del CERA y primera del Supercampeonato.

 

Borja Romero.