La pandemia del coronavirus que azota a todo el mundo desde el pasado mes de marzo ha obligado al Comité Organizador del Rallye Islas Canarias trasladar la sede de la edición número 44. La situación sanitaria impone una serie de controles imposibles de implantar en el que ha sido el entorno natural de esta prueba internacional durante buena parte de su historia. Por ello, el centro operativo del rallye y las asistencias abandonan el Parque Santa Catalina para trasladarse al Estadio de Gran Canaria.