El retorno de José Antonio Suárez al campeonato de España de rallyes significó para el joven piloto praviano un capítulo más en una temporada en la que los infortunios de distinto tipo le están impidiendo concretar en resultados su indudable rapidez.

José Antonio y su copiloto, Cándido Carrera, partían en Orense con la intención de rodar el máximo de kilómetros con el Ford Fiesta R2 y con el aliciente de competir con otros cuatro equipos que tomaban parte con el mismo vehículo en la segunda cita gallega del nacional de rallyes.

Desde el primer tramo, una superespecial de terreno mixto asfalto-tierra, que tuvo lugar en la tarde del viernes, José Antonio estuvo en la lucha por la victoria en los R2. Tras marcar el segundo mejor crono de la categoría tanto en el corto tramo espectáculo como la primera especial del sábado, el joven praviano estaba a menos de un segundo del liderato entre los R2, posición que era suya ya una vez completado el primer bucle de la mañana, pese a disputar los dos tramos con problemas en los interfonos que hacían muy difícil escuchar las notas que le 'cantaba' su copiloto.

Desafortunadamente, el segundo bucle arrancaba para José Antonio y Cándido con un pinchazo en el tramo de Toen que les obligaba a realizar sin rueda de repuesto el segundo paso por el largo San Pedro de Rocas, cuyos numerosos cruces se encontraban muy sucios y llenos de piedras. En estas condiciones, un nuevo pinchazo significaba el abandono para el piloto asturiano y su copiloto gallego que debían decir adiós al rallye justo antes de que este llegase a su ecuador.

Tras este nuevo abandono, el próximo objetivo de José Antonio Suárez es su participación en el rallye de Azores, prueba puntuable para el IRC en la que intentará luchar por las primeras plazas en la categoría reservada a los dos ruedas motrices del popular certamen organizado por Eurosport.

n.p