Por fin después de tantos meses los motores del WRC han vuelto a rugir. El Rallye de Estonia, que entraba en el calendario del mundial por primera vez, marcaba el regreso del Campeonato del Mundo de Rallyes de la FIA, después que el COVID-19 haya puesto el freno allá por el mes de marzo en México.
En tierra del vigente campeón del mundo, Ott Tänak, en la jornada de hoy se ha disputado el shakedown y la primera especial, una pequeña toma de contacto para los tramos puros y duros que forman las jornadas de mañana y domingo.
En el shakedown, los pilotos han demostrado que la inactividad de estos meses no han pasado factura ya que solo décimas de segundo separaron a los pilotos líderes en el tramo de Abissaare de 6,23 km hasta que el campeón del mundo dio el golpe en sus dos últimas pasadas. Finalmente terminó 1,4 segundos más rápido que el segundo clasificado.
El tiempo del estonio confirmó su condición de favorito previo a esta cuarta prueba del Campeonato del Mundo de Rallyes de la FIA, que visita el estado báltico por primera vez. El rallye también marca la prueba 600 del WRC desde que la serie comenzó en 1973.
El piloto del Hyundai i20 marcó el ritmo en la primera pasada, como uno de los dos pilotos que rompieron la marca de los tres minutos. Después de regresar al parque de asistencia de Raadi en Tartu, Tänak volvió a salir y bajó su tiempo anterior en 1,6seg.
Completó su trabajo de la mañana reduciendo todavía más su marca de referencia en 0,4 segundos más para encabezar al líder del campeonato Sébastien Ogier, pilotando su Toyota Yaris, que escaló posiciones en la clasificación con una muy buena pasada final.
Ya para la tarde, tocaba el turno de la primera especial del Rallye de Estonia, en la que Ogier y Lappi calcaron sus cronos en el estrecho y retorcido tramo del parque de Tartu, de 1,29 km, a las afueras de la ciudad.
Lappi se sorprendió a sí mismo con su actuación en su Ford Fiesta, después de menos tiempo de preparación al volante que la mayoría de sus rivales, aunque si es verdad que este tramo no sirve para sacar comparaciones muy reales.
A sólo una décima de segundo en la tercera posición se encuentra el Hyundai i20 de Ott Tänak, el estonio estaba emocionado por competir frente a sus fans en una prueba del WRC por primera vez.
Su compañero de equipo Craig Breen fue cuarto, a pesar de que parece que le costó arrancar en la línea de salida, con el Yaris de Elfyn Evans a continuación en quinto lugar.
Alberto Novoa.
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