Tras el Rallye de Estonia, Kalle Rovanperä ha vuelto a dar otro paso, casi definitivo, hacía su primer título absoluto en el Mundial de Rallyes.

Está de dulce, está imparable y si nadie lo remedia, estamos en la cuenta atrás hacia el primer título del prodigio finlandés. Los números hablan por si sólos, 5 victorias en 7 Rallyes y casi el doble de puntos que su más inmediato perseguidor. La irregularidad del resto, y un año casi perfecto de Kalle, están practicamente sentenciando el campeonato en su ecuador.

La suerte del campeón le llaman, y hay que tenerla. En Estonia al igual que en Portugal, el factor meteorológico, tantas veces influyente en los Rallyes, se alió con el finlandés. En la etapa del viernes cuando Evans era líder, en el último tramo una tormenta "perfecta" favoreció a Rovanperä que se encontró el tramo en mejores condiciones, y pudo auparse al liderato. Algo similar, y con los mismos protagonistas pasó en Portugal, cuando el sábado en Amarante Rovanperä también se alió con la lluvia para colocarse líder por delante de su compañero de equipo Elfyn Evans.

 

Toyota si, pero Rovanperä más.

En este primer año de los híbridos, está quedando claro que Toyota ha llegado muy preparada, y está un paso por delante de Hyundai, que es su gran rival, ya que M-Sport aunque si ha demostrado potencial con el Puma, no tiene un equipo a la altura para competir el campeonato.

Pero es que la superioridad de Kalle Rovanperä va más alla de su coche. Toyota lleva ganado 5 de 7 Rallyes, por uno de M-Sport, y otro de Hyundai. Y quien se ha llevado los 5 Rallyes? En un equipo con Elfyn Evans, Sebastien Ogier o Esapekka Lappi, ningún otro compañero de Rovanperä sabe lo que es ganar. Es cierto que Ogier está completando una temporada parcial, y el año de Evans está siendo muy irregular y con "mala suerte" en momentos clave, pero los números son los números, y Toyota sin Rovanperä aún no sabe lo que es ganar.

Después de los Sebastien, tiranía Kalle.

Es pronto pero más de uno está empezando a pensar en que esto puede volver a ocurrir. Primero fue Loeb, luego su tocayo Ogier y ahora parece que Rovanperä tiene intención de dominar el WRC por un periodo largo de tiempo. Se da una circunstancia que es clave, encontrar el acomodo en un equipo dominador. Si Toyota permanece, y Rovanperä sigue, pueden hacer un binomio casi insuperable por unos años. Es cierto que personalmente creo, que la generación de Tänak, Evans o Neuville aún no han dicho la última palabra y deben luchar con más dureza por el mundial en los próximos años. También creo que Oliver Solberg pronto encontrará esa estabilidad que le permita estar cerca, y nos puede dar una buena batalla con Rovanperä. Pero esto no son más que especulaciones, y la realidad a día de hoy, es que el primer título está muy muy cerca, lo que luego venga, esperamos disfrutarlo.

 

Borja Romero.