La primera victoria con el Ford Puma en su vuelta a M-Sport ha sido diferente a lo que el estonio nos tenía acostumbrados.

 

Dos Rallyes tardó Ott Tänak en ganar con el Ford Puma Rally1. El estonio, gran apuesta de M-Sport para este 2023, ha demostrado ya en Suecia que este puede ser su año, y va a poner todo de su parte. Tras un Monte-Carlo un tanto "apagado", donde desde el principio no se mostró del todo contento con el rendimiento del Ford, y en un Rallye tan complicado como suele ser el primero del año, llevó acabo un planteamiento conservador para acabar 5º, eso si, sumando cuatro puntos en la Power Stage. En la segunda prueba de la temporada, un Rallye más del gusto del estonio, si sacó todo su potencial.

A diferencia de lo que nos tiene acostumbrados Ott Tänak, en Suecia consiguió una victoria a base de regularidad, hacer una buena gestión en los neumáticos y no cometer errores. Aprovechando que salía 4º el primer día, con mejor posición de salida que el resto de candidatos al título, se colocó ya entre los primeros desde el primer tramo.El bucle de la mañana del viernes conseguía acabarlo en primera posición, eso si, sin marcar ningún mejor tiempo. Por la tarde arrancaba cediendo casi diez segundos con Craig Breen y así el liderato. En el TC7, conseguiría su primer y único Scratch del Rallye, cerrando el día con un segundo puesto en el TC8, y recuperando la distancia con Breen, para acabar el viernes a sólo 2,6 del irlandés.

El sábado la tónica sería la misma, el estonio siempre entre los mejores, pero sin marcar ningún mejor tiempo. Por la mañana cerraba el bucle manteniendo distancias con Breen. El sábado por la tarde Tänak intentó marcar las diferencias. En el TC12 sólo lo superaba Rovanperä, aunque con pocas distancias. En el TC13 empezaban a suceder "cosas" con los Pirelli. Breen llegaba a meta con el neumático desecho y sin saber que había pasado, aún así sólo perdía 1,2 con un conservador Tänak, que volvía a ser segundo en meta. En el penúltimo tramo del día el de M-Sport salió decidido a dar el golpe, y a mitad de tramo estaba siendo mucho más rápido que Breen y el resto, aprovechando su mejor estado de neumáticos para atacar a tope. Pero al igual que Breen se encontraría con que las Pirelli le querían fastidiar el Rallye. Tänak perdía toda su ventaja y no conseguía el mejor tiempo al llegar a meta, también con un neumático desecho y sin saber el motivo. En el último tramo del día Ott Tänak sólo podía ser 5º, pero es que Breen aún lo pasaba peor, y acababa 8º cediendo seis segundos con el estonio, y cerrando el día a 8,6 del primer puesto.

En la primera pasada por el tramo de 26 kilómetros que se hacía dos veces el domingo, Tänak conseguía aventajar a Breen por 3 segundos, dejando la renta en 11,6. En ese momento fue cuando el equipo Hyundai decidió que no había nada que hacer, penalizando Craig Breen para que Neuville ganara un puesto, algo que al final no sucedería. Así Ott Tänak no tuvo la presión hasta el final, realizó un tiempo discreto en el penúltimo tramo, y si corrió mucho en el último para intentar conseguir el máximo de puntos. Al igual que en el resto del rallye tampoco fué el más rápido en la Power Stage, quedó 3º a 7 décimas del ganador, pero se llevó lo más importante la victoria final en un rallye que gestionó a la mil maravillas.

 

Esta victoria de Tänak en su vuelta a M-Sport recordó mucho a la etapa de Sebastien Ogier en el equipo inglés. El campeón francés vivio dos temporadas en M-Sport en las cuales tuvo que correr muchas veces con la calculadora, sabiendose que no era el más rápido en muchas situaciones, pero a base de regularidad y gestionando muy bien la temporada consiguió el título tanto en 2017 como en 2018. Ahora es el turno de Tänak, podrá conseguir lo mismo el estonio?

 

 

Borja Romero.