Elfyn Evans volvió a ganar un Rallye del WRC mucho tiempo después, una prueba con Craig Breen siempre presente.

Este fué el fin de semana más dificil de los últimos años para la familia del Mundial de Rallyes. La pérdida del queridísimo Craig Breen antes de la prueba dejaba a todos helados, y con pocas ganas de correr realmente. Pero precisamente por Craig Breen, y por el legado que deja el irlandés con su amor incodicional por los Rallyes, todos se pusieron el casco por él. Desde el jueves en las entrevistas tras el Shakedown, hasta el domingo en la Power Stage, la emoción estuvo a flor de piel.

Los pinchazos del viernes fueron clave.

En lo deportivo, el Rallye de Croacia no decepcionó en absoluto, unos tramos súper exigentes, con condiciones complicadas y que nos dejó imágenes espectaculares. Para muestra este vídeo.

Con un inicio de Rallye dominante por parte de Sebastien Ogier, el pinchazo en el TC2 tanto del francés como de Kalle Rovanperä dejaba sin opciones de victoria a los dos Toyota. Thierry Neuville tomaba la delantera, el de Hyundai sólo marcaba un scratch en la primera jornada, no se mostraba del todo contento con el comportamiento del I20 Rally1, pero aún así se mostraba muy combativo. Segundo acababa la jornada un Elfyn Evans que se quedaba como única alternativa de Toyota. El galés se quedaba a sólo 5 segundos tras recuperar tiempo en las segundas pasadas y parecía el principal rival. Por detrás un Ott Tänak que no estaba satisfecho con el rendimiento del Ford Puma, y Esapekka Lappi, que se mostraba mucho más adaptado y confiado al Hyundai sobre asfalto, los dos estaban a a 30 y 33 segundos respectivamente.

Neuville vuelve a fallar en momentos clave.

El sábado se arrancaba con Neuville ampliando distancias en los dos primeros tramos. Pero en el TC12 volvíamos a ver la cruz del belga. Thierry se salía cuando lideraba al golpear una roca en el exterior cuando entraba algo pasado en una curva sucia de derechas. Esto lo cambiaba todo, y Elfyn Evans se veía lider, con un Ott Tänak que parecía que podía darle guerra al galés. El estonio de M-Sport llegaba a situarse a 12 segundos en el TC14, pero no llegaría a más. En los dos últimos tramos del sábado volvía a sufrir con la fiabilidad del Puma, y tenía que ceder tiempo hasta ampliarse la distancia a los 25 segundos. 

Sin sobresaltos el domingo.

Lo más interesante del domingo fué la pelea entre los dos gallos de Toyota. Tanto Ogier como Rovanperä venían remontando y ya se encontraban 4º y 5º respectivamente. El finlandés no se conformaba y atacaba muy duro para superar a su compañero. Recordamos que ambos eran los encargados de sumar puntos para la marca, por lo que Ogier dió sensación de no querer meterse en peleas internas. 4º Kalle Rovanperä y 5º finalmente Sebastien Ogier. Muy buena gestión fue la que hizo Esapekka Lappi todo el fin de semana. El de Hyundai necesitaba un buen resultado y cuando se encontró el tercer puesto sabía que no podía fallar. Sin la velocidad para meterse en más peleas Lappi firmaba un muy importante podium para Hyundai, y para él personalmente. Ott Tänak no acababa contento con el segundo puesto, pero la realidad es que son unos puntos muy importantes de cara al campeonato. Tänak está en la batalla.

Elfyn Evans no conseguía la victoria en el WRC desde Finlandia en 2021, y también sabía lo que era perder un Rallye de Croacia en el último tramo, así que este fin de semana se iba a desquitar de todo eso. Junto a un emocionadísimo Scot Martin, copiloto de Breen en la época de Citroën, el galés le brindaba esta victoria a su amigo Craig. Primera victoria en la generación híbrida para un Evans que ahora se situa lider de un Mundial realmente abierto, y que espera recuperar al mejor Elfyn.

 

 

Se cerraba así un fin de semana lleno de emociones, en el que no nos pudimos sacar de la cabeza al bueno de Craig Breen. Todos corrieron por ti, y tus frases las tenemos grabadas en nuestra mente.

 

"Don´t forget to enjoy...You have to have fun, life is too short".

 

 

Borja Romero.