El lema del Rallye de Azores es «para los bravos» y sin duda que lo es. Se trata de un rallye que iguala la dificultad de sus tramos con la belleza de los mismos y si, como ocurrió en la primera etapa, la lluvia y la niebla hacen acto de presencia, se trata quizá de la prueba más difícil del ERC. En esas circunstancias Javier y Adrián brillaron, asumiendo un liderato en el ERC2 que no abandonarían hasta llegar al podium final en Ponta Delgada.

Ambos marcaron el ritmo durante la jornada del viernes para llevar su diferencia con Victor Cartier al final del día hasta los 3:37,1. Por su parte Joan Vinyes y Jordi Mercader no tuvieron un buen comienzo del rallye, un manguito del turbo que se soltaba en el primer tramo lastraba sus prestaciones, llevándoles a perder más de 8 minutos con la cabeza.

Con el liderato de Javier y Adrián afianzado, el objetivo del Equipo era claro para la segunda etapa, los primeros iban a administrar su ventaja mientras que Joan y Jordi intentarían recuperar el mayor tiempo posible con respecto a Dmitry Feofanov. Y así fue, Joan y Javier se repartieron los scratchs durante el primer bucle, que incluía el paso por el mítico tramo de Sete Cidades, donde Joan marcaba un muy buen tiempo.

En la recta final las alarmas saltaron en el equipo cuando Javier sufría un problema con un amortiguador, el ritmo y la dureza de la prueba empezaba a hacer mella en todos los equipos supervivientes. Pardo gestionaba bien la situación, ganando su tercera prueba del ERC2 y firmando una muy meritoria décina plaza absoluta, mientras que Joan lograba quedarse a 19,6 de Feofanov, lo que le suponía la cuarta plaza final.

Para Juan López Frade, «marchamos impresionados de Azores, un paisaje espectacular y quizá uno de los mejores rallyes del mundo. En lo deportivo hemos dado un paso al frente de cara a nuestro objetivo, asumiendo el liderato del ERC2 y ahora toca defenderlo con uñas y dientes en nuestra segunda casa, en Portugal con la disputa del Rallye de Fafe. »

 

Alberto Novoa.

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