Como si de un homenaje a la Reina Isabel II se tratase, parece que los Ford Puma Rally1 de la escuadra británica han llegado a Grecia para mostrar su potencial. Sebastien Loeb sigue dando muestras de que es un pilotazo y Loubet parece que quiere sumarse a la saga de los galos dominadores en el WRC, marcando su primer scrach y haciendo doblete francés y de M-Sport en la primera jornada de la cita helena.
La verdad que esta primera jornada ha sido un día de ensueño para la escuadra británica, con sus Ford Puma encabezando la clasificación en cada uno de los tramos mientras el rallye se dirigía hacia el norte tras el espectacular comienzo del jueves en Atenas.
Loeb fue primero en dar el do de pecho en las siempre complicadas pistas de tierra de Grecia y abrió una ventaja temprana en su cuarta salida del WRC de la temporada. Sin embargo, a medida que las temperaturas se disparaban, el nueve veces campeón del mundo perdía algo de ritmo. Un exceso de velocidad en una curva cerrada en la especial de Dafni fue suficiente para romper el ritmo de Loeb, que cedió el paso a su compañero de equipo Loubet, que se hizo con el primer puesto y consiguió su primera victoria de tramo en la máxima categoría del WRC.
El joven francés estaba muy cerca de cerrar el primer día al frente de la general, pero Loebtenía un poco de ventaja en Bauxites, la última especial del día. Y es que este tramo ya lo había corrido en 2012 y ello le suponía una ventaja expresada en 10 segundos más rápido que Loubet, dejando a la pareja Loeb- Galmiche al frente de la general en el primer día en Grecia con 1.7 segundos de margen.
Por detrás de los Puma, Esapekka Lappi ocupaba la última plaza del podio a 8,7 segundos con su Toyota GR Yaris, mientras que por detrás del piloto finlandés tenemos a los tres pilotos de Hyundai, con Neuville, Sordo y Tanäk.
El polvo persistente perjudicó al belga en los primeros compases del día y una puesta a punto desequilibrada le hizo luchar contra el subviraje, aún así solo cedió 7,3 segundos con Lappi y saca 22,2 segundos a su compañero del i20 N, Dani Sordo, que no confiaba en sus notas y se quejaba de no poder llevar un ritmo constante.
Ott Tänak completó la mayor parte de la etapa con una unidad híbrida defectuosa que dejó a su Hyundai corto de potencia. Detrás de él se encontraban Gus Greensmith y Elfyn Evans, con sólo 3,4 segundos de diferencia entre los tres.
El líder del campeonato, Kalle Rovanperä, se tuvo que conformar con la novena posición al verse perjudicado por tener que abrir pista. El joven de Toyota se enfrentó a unas condiciones extremadamente duras y sus esperanzas de conseguir el título de pilotos este fin de semana parecen escasas, pero mañana será un nuevo día y veremos donde puede llegar a estar el joven piloto nórdico.
Alberto Novoa.
