La masterclass que Sebastien Ogier había impartido por la mañana parecía casi definitiva, pero en la repetición de las especiales por la tarde el panorama ha sido distinto. Esapekka Lappi lanzaba un ataque brutal y conseguía, no solo reducir la desvetaja de 16.3 segundos al mediodía, sino que era capaz de asaltar el liderato, dejando la emoción por todo lo alto para la jornada de mañana, ya que tras caso 150 kilómetros contra el crono, Lappi lidera por tan solo 0.1 segundos sobre Ogier.

Y todo esto en una de las jornadas más difíciles en el Campeonato del Mundo de Rallyes de la FIA de este año, en el que los equipos se enfrentaron a más de 140 km de tramos de tierra en condiciones meteorológicas cambiantes, amenazando lluvia durante las primeras especiales y haciendo acto de presencia por la tarde.

Ogier, que disputaba su cuarto rallye este año a bordo de un Toyota GR Yaris, comenzó en cabeza y lideraba con una aparentemente cómoda ventaja de 16,3 segundos en el ecuador de la jornada, tras superar a su rival finlandés en la primera pasada por el Monte Lerno, de 49,90 km de longitud.

Pero la ventaja del francés empezó a diluirse en la repetición de las especiales. Lappi atacó con todo, marcando el mejor crono en Tantariles 2, recortando con Ogier 7.6 segundos, y lograba ser el segundo más rápido en la siguientes especiales, la de Terranova, por detrás de Neuville, y en la mítica Monte Lerno, por detrás de Rovanpera, con lo que lograba arrebatarle el liderato a Ogier por la mínima, 0.1 segundo.

A pesar de tener que lidiar con un freno de mano que funcionaba de forma intermitente, Thierry Neuville se abrió paso en la clasificación para situar a dos Hyundai entre los tres primeros. El belga aventajaba a Ogier en 18,5 segundos al cierre de la jornada, mientras que el líder del campeonato, Kalle Rovanperä, le seguía a 27,5 segundos.

A sólo 1,3 segundos se situó Takamoto Katsuta, que sufrió un susto en el bucle matinal al chocar contra una piedra tras pasarse en una curva a izquierdas. El percance le costó unos 20 segundos y mantuvo a sus mecánicos de Toyota ocupados en la asistencia.

Un pinchazo en la rueda delantera derecha al final del Monte Lerno dejó a Elfyn Evans a 18,2 segundos de su compañero de equipo, sexto en la general. Aventajó a Ott Tänak, de M-Sport Ford, que superó un fallo en la bomba de agua, en 4,2 segundos.

 

Alberto Novoa.