Está claro que todos los pilotos que compiten en el Campeonato del Mundo de Rallyes de la FIA tienen un talento especial, pero además hay otros, como Loeb, Ogier o ahora Kalle Rovanperä, que tienen un don especial y que les hace estar un peldaño por encima del resto.

Y es que el bueno de Kalle ha pasado, en menos de una semana, de estar " de vacaciones " a liderar en la jornada del sábado el Rallye de Polonia y llevarse, momentaneamente, los 18 puntos de la cita polaca.

Además, Kalle y Jonnen, lo han hecho de una manera espectacular, siendo los más rápidos en seis de las siete especiales que se han disputado hoy, finalizando con una ventaja de casi 10 segundos sobre Andreas Mikkelsen que no ha podido con el ritmo impuesto por el joven finlandés.

El fuerte ritmo de los de Toyota ha quedado patente en la última especial de hoy. El desgaste de los neumáticos amenazaba con echar por tierra el dominio del finlandés debido a las altas temperaturas de la tarde, que alcanzaron casi los 30 °C. Las gomas Pirelli de compuesto duro que componían la mayor parte de la selección de Mikkelsen superaron a la mezcla de Rovanperä de cuatro blandos y un duro. A pesar de ello, Rovanperä sacó el máximo partido a los neumáticos que le quedaban, e incluso añadió 4,2 segundos a su liderato en el tramo final de 22 km.

La pelea por el segundo puesto ha estado bastante entretenida entre Evans y Mikkelsen. El piloto noruego, líder en la jornada del viernes, bajaba al tercer puesto por detrás de Elfyn Evans tras la disputa de las dos primeras especiales,  después de dos tramos, pero el doblete de Toyota duró poco, ya que el galés se quedaba sin el neumático trasero en la segunda pasada por la especial de Swietajno, cediendo casi 10 segundos, lo que le hacía tener que conformarse con la última plaza del podio, a 6,7 segundos de Mikkelsen.

La parte positiva para Evans ha sido que ha logrado superar a sus principales rivales por el título, Thierry Neuville y Ott Tänak, en el reparto de puntos del sábado, sumando 13 puntos frente a los seis de Neuville y los cero de Tänak. Este último, que ya había parado el viernes, volvió a retirar su Hyundai este mediodía en un intento de preservar el coche para el Súper Domingo.

Adrien Fourmaux continuó su buena racha hasta la cuarta posición de la general con un Ford Puma de M-Sport, terminando la etapa a 20,9 segundos de Evans, pero a 21,2 segundos del quinto clasificado, Mārtiņš Sesks, que pilotaba un Puma no híbrido. La sensación en este Rallye de Polonia, Sesks, lograba mantener a una décima al líder del campeonato, Neuville, mientras que Grégoire Munster completó la lista de los siete primeros.

 

Alberto Novoa.